Ese mismo verano los 3 amigos decidieron ir a un río. Por suerte para Tara era el de su pueblo. Poco a poco Tara fue fijando su interés en un chico diferente a los demás.
Paco se había percatado de ese intruso pero no mostró ningún interés porque pensaba que era un conocido o un familiar…
Una figura se acerco a Tara…
-Hola,-dijo esa figura era mas o menos de la edad de Paco y Antonio; Rubio y de ojos claros, era como un príncipe sacado de un cuento de hadas…- Me llamo Carlos, ¿y tu?
-Me llamo Tara; encantada de conocerte- la intriga que sentía por aquella peculiar y extraña persona era muy grande, tanto que estuvieron hablando un buen rato.
Paco y Antonio seguían ignorantes a lo que les iba a ocurrir.
-Tar…-Paco fijo su mirada en aquellas figuras sonrientes que desprendían un aura de serenidad incalculable-a…
Los dos se quedaron absortos mirando cada movimiento del intruso. Procurando que no tocase a Tara en ningún momento.
Carlos se fue al rato, y tara se quedo diez minutos mas tomando el sol.
-Chicos tengo que ir un momento a mi casa, vengo ahora
-Vale- dijeron los dos desconfiados, asíque la siguieron
Derepente tras un camino de ramas y matorrales encontrando a aquel intruso junto a Tara.
-¡Tara! - grito Paco - ¡Que aces con ese intruso!
-No es un intruso… el es Carlos - Dijo ella con una voz triste
-¿¡Acaso el es tu…!? - no pudo seguir diciendo mas porque ya sabía la respuesta
-¿Novio? - concluyo Antonio
- Si…
- Tara, ¿quiénes son estas personas? - Dijo Carlos
-Son Paco y Antonio, unos amigos de la infancia
Ellos se fueron dejando a la pareja sola.
Antonio muerto de rabia se había mordido el labio inferior y comenzado a sangrar.
-¿Estas enamorado de ella? – dijo Paco casi tan triste como para llorar-
- No… ya te lo dije hace tiempo, solo la veo como a una hermana pequeña…
Siguieron juntos su camino discutiendo sobre lo que había ocurrido, pero pensando que era un mal sueño.
-Si me entero que estas enamorado de ella tendré el derecho a pegarte y tu no te podrás defender…
- Esta bien… - Antonio había respondido con una cara seria como una mascara de cristal.
Poco a poco se fueron acercando al río y dejando de hablar del tema porque no querían que nadie se enterase.
Diario de Paco:
No me lo puedo creer después de todo lo que hice por ella y ahora está con otro… Bueno no podía esperar más, ella me ve como a un hermano mayor no podría esperar que todo fuese como en los cuentos de hadas, esos en los que el príncipe y la princesa eran amigos de toda la vida y acababan juntos…
Diario de Antonio:
Casi me descubre, pero tiene razón no puedo estar con ella no tengo derecho… Después de lo que le hice.
Diario de Tara:
El es hermoso y muy bueno creo que podría enamorarme de el y olvidarlo…
Ese amor que solo ocurre en los cuentos de hadas no ocurriría en la realidad, después de todo solo me ve como su hermana pequeña.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar